El baloncesto femenino nos dejó una jornada más de aprendizaje y esfuerzo con el enfrentamiento entre el BAZU Segunda División y el aguerrido equipo de C.B. Cuenca. Las expectativas eran altas ante un rival con antecedentes en la categoría Nacional y refuerzos que apuntaban a un claro favoritismo para el ascenso.
Nuestro equipo se vio inmerso en una marea de intensidad y precisión por parte del Cuenca desde el salto inicial. El primer asalto concluyó con un contundente 22-7, un resultado que no reflejó la valentía de nuestras jugadoras, sino la eficacia de un equipo que exprimió cada error y cada hueco en la defensa.
A pesar de la dura entrada, las nuestras no cedieron en su empeño y ajustaron su defensa, logrando contener durante más de un cuarto a un equipo que parecía imparable. No obstante, el día no acompañaba en el aspecto ofensivo; las canastas se resistían y el CB Cuenca no perdonaba, ampliando la brecha en el marcador hasta un inamovible 48-19 al final del tercer periodo.
La recta final del encuentro fue un espejo de la determinación de nuestras chicas, con Marta Prieto liderando una serie de triples que, aunque insuficientes para revertir el destino del partido, sí sirvieron para mantener la moral alta y dejar claro que la lucha jamás se abandonaría.
La jornada cerró con un 61-29 que más que un marcador, es un recordatorio del trabajo por hacer y de la resiliencia necesaria para enfrentarse a los gigantes de la liga. Ahora, con la mirada puesta en el próximo derbi contra Yunquera Salesianos, nuestro equipo se prepara para un choque clave, con la clasificación y el orgullo en juego.
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