El BAZU Baloncesto Azudense se enfrentaba al CB Daimiel, un equipo poderoso y favorito para alzarse con el título de la categoría. Con jugadores de experiencia en categorías superiores y un físico imponente, los locales se presentaban como un desafío mayúsculo para los nuestros.
El primer cuarto comenzó de manera esperanzadora para el BAZU, que impuso su ritmo desde el inicio. Con una defensa efectiva y aprovechando el desacierto rival en el tiro exterior, los visitantes llegaron a liderar por 6-17 a falta de un minuto. Sin embargo, un par de despistes defensivos permitieron a Daimiel anotar dos canastas rápidas para cerrar el cuarto con un 12-17 que recortaba distancias.
El segundo cuarto fue un punto de inflexión. Los locales, más acertados, igualaron rápidamente el marcador, mientras que el BAZU no lograba mantener la fluidez ofensiva ni frenar las acometidas rivales. La lucha fue intensa y el marcador se mantuvo ajustado hasta los últimos instantes del cuarto, cuando Daimiel encadenó una canasta tras rebote ofensivo y un triple de Villarejo para irse al descanso con un 36-30, la mayor diferencia hasta el momento.
Tras el descanso, el BAZU intentó corregir errores en ataque, pero la defensa seguía sin encontrar su mejor versión. Daimiel castigó desde el perímetro con un 4/7 en triples durante el tercer cuarto, mientras que los nuestros, a pesar de responder con un 3/6 desde la misma distancia, no lograron recortar diferencias. El intercambio de canastas benefició a los locales, que ampliaron la ventaja a 9 puntos al final del cuarto.
El último periodo mostró la garra del equipo azudense, liderado por un inspirado Adrián Sánchez, que anotó 11 de sus 15 puntos en estos minutos. El BAZU llegó a igualar el marcador 67-67 en los compases finales, pero varios errores y pérdidas en momentos clave permitieron a Daimiel recuperar el control. En el tramo decisivo, los locales aprovecharon mejor sus tiros libres, dejando el 76-70 definitivo en el marcador tras una canasta sobre la bocina.
Entre las actuaciones destacadas del BAZU, sobresalió Manu Oillataguerre, con 23 puntos y una valoración de 29, seguido por Adrián Sánchez (15 puntos) y Manuel Mangue (12). Jorge Barra también contribuyó con una sólida actuación valorando 18.
A pesar del resultado adverso, el BAZU demostró que puede competir al más alto nivel incluso contra los favoritos de la liga. Toca seguir trabajando y perfeccionando detalles para lograr que el esfuerzo se traduzca en victorias.
¡¡1, 2, 3… BAZU!!
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