El pasado fin de semana, el BAZU Primera Nacional se enfrentó a Polígono Toledo en la jornada 17 de liga. A pesar de que el rival ocupa posiciones bajas en la clasificación, sabíamos que era un equipo peligroso, con buen baloncesto y mucha intensidad. Ya en la ida nos pusieron en aprietos, obligándonos a remontar para llevarnos la victoria por solo seis puntos. Sin embargo, a pesar de ser conscientes del reto, no logramos trasladar esa mentalidad a la pista y firmamos un partido para olvidar.

Desde el primer cuarto, los locales marcaron el ritmo. BAZU comenzó con muchos problemas ofensivos, sin encontrar fluidez en el juego y con una defensa que no lograba frenar sus situaciones de 1×1. Polígono Toledo aprovechó la desconexión azudense para tomar ventaja y cerrar el primer cuarto con un 17-9.
El segundo periodo no trajo mejoras. El acierto seguía siendo escaso, los porcentajes de tiro muy bajos y las pérdidas se acumulaban (hasta 16 en la primera parte), impidiendo encontrar comodidad en ataque. Polígono Toledo siguió sumando con paciencia, ampliando su ventaja con un parcial de 14-12 que dejaba el marcador en 31-21 al descanso.
La charla en vestuarios buscó despertar al equipo, pero la reacción no llegó. Aunque hubo ligeros ajustes ofensivos, la falta de acierto fue absoluta. Fallamos 21 tiros libres, anotamos únicamente 2 triples en todo el partido y acumulamos un total de 23 pérdidas de balón, cifras que hacen prácticamente imposible ganar cualquier encuentro. A pesar de los intentos por encontrar soluciones, BAZU nunca pudo tomar el control del partido ni imponer su ritmo.
Finalmente, Polígono Toledo no nos permitió ganar ni un solo cuarto, sellando una victoria merecida ante un equipo visitante que nunca logró estar cómodo en la pista. El partido concluyó con una derrota dura, que llega en un mal momento, justo cuando el equipo buscaba consolidarse en los puestos altos tras la victoria de la semana pasada ante un rival directo.
En el apartado individual, Álvaro de las Heras fue el único jugador que logró destacar, sumando 11 puntos y 10 de valoración, mientras que el resto del equipo no fue capaz de aportar con regularidad.
Ahora toca levantarse de esta derrota y enfocarse en el próximo reto, nada menos que Daimiel, el líder de la competición, al que nos enfrentaremos este sábado. Será un partido exigente, pero una gran oportunidad para demostrar de qué estamos hechos.
¡¡Vamos BAZU, toca reaccionar!! ¡¡1,2,3…BAZUUUU!!
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